Las disposiciones oficiales sobre el manejo de la contingencia ocasionada por el COVID-2019, han transformado la forma en la que espacios de trabajo se adaptan y sobreviven a un paro que asfixia la economía.
Los gobiernos se mantienen firmes en su decisión de ponderar el cese de la propagación del virus mediante el confinamiento y las alternativas cada vez son menores para la industria y los mercados a nivel global.
De entre todo esto, la tecnología termográfica propone una serie de planes que pueden cambiar el cómo reactivar los sectores empresariales ante esta situación.
Muchos países alrededor del mundo han accedido a permitir una reintegración de los equipos de trabajo a oficinas y plantas si estas cuentan con medidores de temperatura que detectan variaciones peligrosas en sus empleados, así como asumir el compromiso de reportar fielmente dichos casos.
¿Cómo funcionan las cámaras termográficas ante la detección del COVID?
Estos dispositivos miden la temperatura corporal, misma que será uno de los requisitos para poder abrir muchos de los sitios que prevean aglomeraciones de gente con el fin de respaldar la ya popular sana distancia; medida higiénica a la que ya nos hemos acostumbrado.
David Argüelles, director de Área, Telecomunicaciones, Audiovisuales & Security Systems de la empresa asturiana Adico, especialista en soluciones globales de seguridad y asesoramiento, explica que: “una de las maneras de identificar personas infectadas es detectando un aumento de su temperatura corporal.
La termografía infrarroja (IR) proporciona un mapa visual de la temperatura de la piel en tiempo real lo que permite visualizar un flujo constante de personas sin necesidad de detener a cada una para medir su temperatura.
La fiebre, es uno de los síntomas clave a descifrar si se prevé una detección temprana. Las compañías que buscan reactivar sus procesos, podrán argumentar ante las instancias de salubridad que sus espacios, además de encontrarse correctamente sanitizados, se encuentran libres de personal con síntomas de COVID-2019.
¿Cómo funcionan estas cámaras?
Las cámaras termográficas trabajan en un rango conocido como infrarrojo cercano. Dispone de un sensor térmico normalmente un microbolómetro no refrigerado, que al recibir esta radiación infrarroja se calienta y cambia su resistencia eléctrica. Este parámetro se mide y se equipara a una determinada temperatura, y le asigna una escala de colores, crea esa imagen coloreada que es lo que vemos en la pantalla que actúa de receptor.
Los modelos más avanzados permiten monitorear varias personas a la vez, por lo que son ideales para negocios, supermercados y sitios concurridos como museos, oficinas, fábricas. Incluso aquellas instaladas y que funcionen con IA son capaces de usar la tecnología de detección del cuerpo humano y su enfoque se centra en la cara para la toma de temperatura, así que otras fuentes de calor no causarán falsas alarmas.
¿Por qué ocuparlas en tu empresa?
Estos dispositivos son sumamente precisos, y tienen la capacidad de almacenar la información que recaban, de tal forma que, de ser necesario, estos elementos pueden ser estudiados y utilizados como evidencia ante las autoridades sanitarias, con el fin de comprobar que las instalaciones siguen libres de riesgo y no hay personas con fiebre dentro de ellas.
Un equipo adecuado para dar solución sencilla
Thermal Expert TE-Q1
- Para dispositivos móviles
- Tamaño del sensor: 384 x 288
- Rango de temperatura: -10 °C ~ 150 °C
- Lente: 6.8 mm F 1.3 / 13mm F 1.0
- Ventajas: Accesible, amplio FOV, excelente sensor, versátil al conectarse directamente a dispositivos móviles (Android) o a cualquier computadora.
Si requieres más información sobre las cámaras termográficas que en Kapter tenemos en existencia o sobre su funcionamiento, así como la capacitación del personal para ocuparlas, no dudes en contactarnos.